viernes, 19 de noviembre de 2010

Volver el tiempo...

Más de un par de veces he dicho que la tecnología y yo no somos la mejor pareja, es más ni tenemos amistad, sólo coincidimos por obligación y necesidad un par de veces.

Hoy la tan negada tecno (de cariño) me hizo volver el tiempo apróximadamente 12 años...

Me llevo a una tarde cualquiera de no sé que día y me puso de frente a alguien que es muy importante en la historia de mi vida.

Él fue mi novio 4 años, la historia más increíble de romance sincero, de alegria excesiva, de buen humor constante, de sueños, de momentos irrepetibles y de besos deliciosos.

Recuerdo entre tantas cosas que fue muy original al pedirme que fuera su novia, incluso fue cursi, detallista y mi respuesta consistía en darle un beso si era sí y si era no, también darle un beso.

A pesar de estar juntos en la misma escuela, de entrenar ambos en basquetbol y vernos a diario, siempre había una carta, una tarjeta, y esa flor que me llevaba a diario cuando iba a casa a visitarme.

Supongo que discutimos algunas veces, no fueron muchas, no fue importante, nuestro amor, el enamoramiento y la química hasta hoy ninguno de las dos la ha vuelto a vivir.

Un día, esa tarde a la que la tecno me llevo, nos detuvimos pocas calles antes de llegar a su casa, eran días difíciles, su hermano falleció en un accidente, la presión de tener a su madre desesperada queriendo morir y el descontrol de toda su familia ahte la noticia terrible y repentina lo hizo volverse alguien que yo desconocí por completo. Estoy segura, no era la persona que yo conocí.

Me miro, me exigió que fuera distinta, que cambiara mis gustos, mi forma de llevarme con la gente, que me alejara de amigos o de mis ideas de diversión y me ofreció casarnos...claro, no inmediatamente. Me pido a mis 20 años volverme un tipo de mujer adecuada, hogareña, formal y con tendencias maternales para estar preparada al momento de la boda que sería 5 años después.

Fue: lo tomas o lo dejas.

Hoy después de todo lo pasado y evidentemente lejos de él, en una platica inesperada acepto que me alejó de su vida en un momento muy difícil sin darse cuenta que quizás era una distanciamiento para siempre, sin darse cuenta de que lo amaba como a nadie y como nunca.

Hoy me sentí diferente, no sé si libre, porque la realidad es que nuestras vidas siguieron, estamos bien, cada quien vive de manera distinta pero dijimos cosas que de haber dicho antes...

EL hubiera no existe, no sabemos que hubiera pasado, nada estaba dicho, lo que si es verdad es que nos faltaron tantas cosas por vivir y nos fue imposible ante las circunstancias, no olvidando que el orgullo y todo lo demás nos hizo creer que no debiamos luchar.

Él me dijo que le fue difícil, a mí no me fue mejor...

Hoy después de tanto leer sus palabras, saber que he sido única y que siempre tiene un pensamiento para mí me hizo entender que si bien soy una mujer exigente es porque sé cuanto amor puedo provocar en alguien que comparta su vida conmigo. No espero menos.

Y la vida sigue, y los tiempos cambian. Nada regresa, pero lo vivido con tanta intensidad, con el corazón en entrega total...definitivamente permanece.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Locuras

Cuando pienso en hacer alguna locura siempre aparece la interrogante ¿va de acuerdo a mi edad?...y termino deteniendome; La verdad es que simplemente quisiera hacer mil cosas, de pronto ser irresponsable y olvidarme de lo que debe hacerse o ser.

Soy responsable de mis actos desde que tengo memoria, la vida me cambio a los 13 cuando mis papás se separaron y mi mamá decidió que el mundo se terminaba, que la vida era diferente para ella sin preocuparle mucho lo que mis hermanos y yo no entendiamos.

Así que tuve 2 opciones: caer en la misma situación y tener una vida simple o problemática o lo que elegí para mí y me permite hoy estar aquí.


Decidí que debía seguir, prepararme, estudiar, y sobre todo decidí que podía y tenía que lograr cumplir mis metas, mis sueños y ser feliz.

Pase momentos complicados y tristes, no entendía mucho, no tenía respuestas, peor aún, no podía preguntar.

Recuerdo que deje de reirme, que deje de jugar, que no era la misma.

Y un día no sé ni en que momento...reaccione.

Llevo 20 años siendo responsable, tomando decisiones, la mayoría de las veces acertadas, al menos según yo. Todo ese mismo tiempo llevo cuidando cada detalle de las cosas por hacer para que me lleven a un objetivo, así que de pronto me doy cuenta de que: estoy agotada.

Y entonces, quiero hacer locuras, quiero ser muy irresponsable, o quizás no tendría que serlo pero sólo quiero no tener que pensar en el después ni en el porque...y sé que no puedo, que me tome atrubuciones y responsabilidades que no me correspondian, entonces le hice a mis padres las cosas más sencillas.

No hay vuelta atrás y no me arrepiento, si no lo hubiera hecho así, quizás y muy seguramente no estaría aquí ni así.

Sólo suspiro, trato de disfrutar y pienso en algo importante: mientras lo disfrute, mientras me haga feliz, así seguirá mi vida, y cuando eso deje de suceder...planearé los cambios.

¿Que si estoy loca?...Por supuesto que lo estoy, malo sería que a estas alturas pretendiera ser una persona coherente.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Los cambios

Tengo muchos pensamientos en la cabeza.

Detecté algo importante, de pronto no puedo cumplir todas las cosas que me propongo, y es que en realidad ayuda ser la única a la que debo explicarle o reponder, pero aún asì no me gusta no cumplir con las expectativas, al contrario.

Soy muy exigente, a veces demasiado, quiero tanto hacer mil cosas que acabo desistiendo. Por lógica suena a que entonces son malas decisiones pero también sé que no del todo.

Dejé el gimnasio, lo siento, era muy cansado correr para llegar, sudar intensamente y salir agotada y trasladarme a casa...iba para quitarme el estrés, pero acabe estresandome porque con tanto trabajo, tenía que luchar a diario para lograr salir a tiempo y asistir...

Dejé la escuela, eso fue ayer o hace unos días. Ha sido el mes en el que menos asistí, por tiempo, trabajo y porque sí, simple y descaradamente.

Las clases de inglés estarán al menos un mes o dos fuera de mis planes, necesito respirar, varios aspectos no me agradaron y decidí al menos en este asunto (aprender) poner tiempo y después retomar.

Un día completo era: levantarse a las 5 AM ir al trabajo, salir a comer a las 3 PM, entrar a clase a las 4 PM, salir 5:30 PM (ya llevando 12 horas de haberme levantado) e ir a la oficina, salir a las 8:00 y mover mi cuerpo con kilos de más al gimnasio con la esperanza de un día entrar en los pantalones que deje hace 2 tallas.

Me estrese, me agote, me sature e increíblemente entre todo eso surgió mi vida social, definitivamente Irónico.

Cuándo me ví tan ocupada (plan que hice porque no tenía nada más que hacer eso con mi vida) entonces sucedió: amigos, cenas, comidas, fiestas, noches de café, programa nuevo, convivencia y una televisión.

¿Soy una irresponsable?...hasta cierto punto Si, lo soy, pero sin tendencia a justificarme, algo más he de estar haciendo por lo cuál cambié, porque si algo es verdad dentro de todo es que no sé estarme quieta.

¿Qué sigue?...lo estoy averiguando.

Sucede, invariablemente sucede.

No se sabe cuando ni como, ni siquiera cuando pasa sabes si lo esperabas, pero sucede, invariablemente llega el momento en el que de pronto te ves a ti mismo haciendo una pausa y pensando: finalmente.

Hablo de muchas cosas, de tantas ideas que tienes un dìa, planes, pendientes, y pareciera un camino interminable, suena complicado, pero como dije, llega el dìa y lo mejor de todo es la sensaciòn de haber sabido siempre que tendrìa que pasar.

Hay una frase que queda perfecta para lo que estoy tratando de explicar: todo llega para aquel que mientras espera, se mantiene ocupado.

Creo que ya fui más clara.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Treinta y Tres


Se me han ocurrido tantas cosas, y he soñado otras muchas más, que de plano pierdo la noción del orden en que quisiera que cada una sucediera.

Cumplí 33, de plano he llegado a un tiempo importante, hoy me detengo a pensar que he hecho, que falta y que podría pasar de repente cambiando todo lo que es ahora mi día a día.

Hay gente que de pronto regresa a mi vida, personas que puedo abrazar y saber que siempre han estado, y nuevos amigos que aún no saben ni la mitad de mi historia y aún así me quieren.

Soy afortunada, soy alguien complacida con la vida, agradecida con Dios por lo que vivo cada instante, por lo que aprendo, soy yo, cumpliendo mis propias expectativas y vaya que con eso ya es suficiente, soy muy exigente, así que todo debe salir bien, y cuando no, debe haber buenas razones y forma de intentarlo de nuevo.

Soy hasta hoy la misma mujer soñadora, la acelerada que quiere triunfar, la mujer que quiere ser exitosa, la fuerte pero ahora un poco más la abierta sin miedo a la opción de ser débil, lo cuál es saludable para mi mente, cuerpo y corazón.

Soy yo a mis 33 años, lo que pensé que sería o una versión aún mejorada.

viernes, 23 de julio de 2010

Muere Lentamente (Pablo Neruda)


Muere lentamente quien no viaja,
quien no lee,
quien no oye música,
quien no encuentra gracia en sí mismo.
Muere lentamente
quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.
Muere lentamente
quien se transforma en esclavo del hábito
repitiendo todos los días los mismos trayectos,
quien no cambia de marca,
no se atreve a cambiar el color de su
vestimenta
o bien no conversa con quien no
conoce.
Muere lentamente
quien evita una pasión y su remolino
de emociones,
justamente estas que regresan el brillo
a los ojos y restauran los corazones
destrozados.
Muere lentamente
quien no gira el volante cuando esta infeliz
con su trabajo, o su amor,
quien no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir
detrás de un sueño
quien no se permite, ni siquiera una vez en su vida,
huir de los consejos sensatos...
¡Vive hoy!
¡Arriesga hoy!
¡Hazlo hoy!
¡No te dejes morir lentamente!

¡NO TE IMPIDAS SER FELIZ!

(Pablo Neruda)

domingo, 18 de julio de 2010

Princesas


Nunca hay que dejar de ser Princesas, ni dejar de soñar en el amor o las ilusiones. Hay que pensar todo el tiempo que somos capaces de provocar en alguien sentimientos especiales, emociones, palabras bonitas y por supuesto detalles.

No hay que dejar de ser Princesa, debemos permitir que los halagos lleguen, que las cosas tomen su tiempo para suceder y no correr tratando de parecer modernas, diferentes y poco anticuadas…finalmente ¿qué tiene de malo creer en el romanticismo?

Nunca hay que dejar de ser Princesas, es bonito dejarse cortejar, vaya eso aún existe

En un mundo moderno, en escenas adaptadas a la realidad actual...pero nunca dejar de ser Princesas

¿Te suena repetitivo?...una vez más: Nunca Hay que dejar de ser Princesas, parece que nos prohibieran algo malo, parece molesto que tantas veces tenga que decirlo, pero a veces en nuestra terquedad intensa perdemos de vista las posibilidades y las cosas increíbles que pueden sucedernos…

lunes, 5 de julio de 2010

Mundo Pequeño

Sin pensarlo, sin que parezca y mucho menos sea algo planeado...siempre vuelvo a estar presente.

Alguien menciono mi nombre, los demás se quedaron mudos, y es que...el tiempo ha pasado sí, la diferencia es que yo si he sabido aprovecharlo para cumplir mis objetivos y aquí estoy, en este mundo pequeño que da vueltas sin detenerse y que cada vez más me acerca al punto de inicio, con la cara en alto, con el corazón trinufante y satisfecho y con la seguridad de haber cumplido cada cosa que soñe, en la medida de lo posible.

Soy feliz, sigo paso a paso el camino trazado hacia una meta;

Lo curioso es que al llegar, siempre inicia una más, si no es que antes.

jueves, 29 de abril de 2010

Nuestros Días


Quizás no lo entienda del todo, me declaro ignorante del tema, totalmente en otro mundo, aunque le diga mil veces que estoy con él y entiendo cómo se siente, sabe que no es posible.

Cada día cuando despierta, supongo que se pregunta la razón, la causa, y siento que no es el único, yo hasta el momento pretendo que nada sucede, que nada cambio, que las horas no pasan y que un día aunque yo me enoje mucho, me dirá riéndose a carcajadas que todo es un muy mala broma y que nada anda mal con su salud.

Y cuando lo escucho, cuando puedo identificar en el tono de su voz esa tristeza, trato de distraer su atención, intento no mostrarle ahora en mi voz que sé lo que pasa, que se que se esfuerza, que sé que ha llorado en silencio muchas veces, pero que cuando suena el teléfono y soy yo, entonces sonríe y se limpia el rostro para no verse afligido… ¡cómo si yo pudiera verlo!

Me arrepiento hoy de todas las veces que por mucho menos pedí a Dios que el tiempo pasara, de las veces que lloré por algo que parecía ser el fin de mi vida, de las noches que no dormí pensando si alguien me quería lo suficiente…

Hoy no es cualquier persona, no es alguien simplemente, hoy sé que el tiempo avanza y pido que Dios nos de más, hoy quiero que los relojes se detengan, quizás que retrocedan un poco, unos días, un par de semanas…dos o tres meses, y entonces iría a verlo, lo abrazaría fuerte, le diría que sí, sin pensarlo tanto.

Sé que su amor es mucho más que lo “suficiente” que un día espere, sé que su fuerza está en el corazón pero que el cuerpo no le responde, sé que los días pueden traer cosas buenas, pero quizás el termino “bueno” sea que él no sufra más…y yo tengo que aceptarlo.

No puedo juzgarlo, yo misma tengo miedo, también lloro a escondidas cuando no hablo con él y aunque no lo sabe, me seco las lágrimas para que no me vea afligida… ¡cómo si pudiera verme!

Hoy me dijo ¡Gracias! Y yo pregunte ¿por qué?...

Contesto: Tú sólo di ¡de nada! Sabes lo que significa que estés aquí aunque sea al otro lado del teléfono.

viernes, 16 de abril de 2010

Según Quien...


El día en sí ha sido extraño, las cosas han pasado lentamente, he estado a punto de gritar enojada por diferentes razones:
El taxi que nuca paso, el Internet que nunca funciono, el auto hacia otra dirección, la llamada perdida, la gente de mal humor…en fin.
Hoy es jueves, los días van pasando y queda poco tiempo, cada vez menos para disfrutar de las mil cosas que quiero hacer, aunque hay algunas que ni he intentado.

He cambiado patinar por dormir más horas, y cuando después de tanto me levanto, pienso de inmediato que al menos una vez debo salir a la calle y dar al menos una vuelta para que haber cargado los pesadísimos patines no sea en vano.

Aunque debo decir algo, la verdad si voy o no, finalmente no hay que explicar nada a nadie, quizás un poco a mi espalda o a la de quien me ayuda a subir o bajar la enorme maleta que sigue en mi cuarto por el momento detenida esperando el siguiente destino.

Hoy me desperté más temprano que otros días, pero fue difícil, mucho más porque ayer no fue fácil conciliar el sueño, las noticias, las situaciones que no entiendo de pronto se juntan y sacuden mi estabilidad.

Alguien me dijo que estoy muy mal acostumbrada a tener el control sobre casi todo, a hacer las cosas de tal modo que si no salen como espero simplemente como espero entonces me enojo y me voy.

Ayer hice algo que ni yo misma entiendo, me porte como niña, y no hablo de un berrinche, que quizás tiene un poco de eso, hablo de correr y escapar de lo que duele, de lo que no me gusta, quería ir con alguien y decirle cuanto me había lastimado lo sucedido, pero entonces hice algo distinto, fui a mi cuarto y me encerré para llorar.

Me causa gracia decirlo, aunque ayer no tanto, no tarde mi 10 minutos quejándome de lo mal tratada que había sido (según yo ) y me dormí, no sé si 2 o 3 horas…

Sonó el teléfono, al otro lado una voz agradable preguntando donde estaba y que tal iba todo…entonces volví a sentirme especial, como me gusta.

Alguien dijo que debo cambiar, que debo pensar si antes hice algo incorrecto, si me fui de casa de manera impulsiva…independizarme a los 23… ¿eso es tan malo?

Cuando uno toma las decisiones la mayor parte del tiempo se supone que sepa que habrá consecuencias, y no sólo eso, se supone que pueda ser capaz de asumirlas. No sé si en todas las ocasiones he reaccionado adecuadamente, pero creo que no estoy tan mal, la he librado, lo he resuelto, y sigo aquí, convencida de que hice si no lo que a todos les pareció lo mejor o adecuado, si fue lo que yo quise, y eso hace que hoy no deba rendir cuentas a nadie, explicar ningún motivo y seguir decidiendo respecto a todo lo que es mi vida.

martes, 13 de abril de 2010

Lunes 12


Al final del día me doy cuenta de muchas cosas, creo que la fortaleza que suelo tener baja un poco estando aquí, quizás es porque no debo cuidarme tanto, porque puedo caminar y sé donde estoy y sé que si encuentro a alguien hay muchas probabilidades de que sea alguien que va a sonreírme y Decir Algo grato a mis oídos.

Hoy las miradas y las voces dijeron: ¡Que bueno es verte!, los deseos y las palabras fueron siempre en positivo y las sonrisas fueron las más sinceras que no he visto en muchos meses, realmente en un par de años.

Estar en casa es una aventura que me hace sentir muchas cosas, nervios, alegría, un poco de expectativa que se crea conforme pasan los minutos y horas y sé que algo falta por pasar.

Ir por cada calle es reconocer lo que soy, la historia que hay detrás de lo que ahora los demás ven; La casa, la escuela, las avenidas, el parque, cada cruce de calles, el ruido, el calor, la energía del sol que siempre ha sido de las más intensas, los colores, el acento en las voces que dicen y dicen muchas cosas que logran hacerme pensar: hace mucho que no escuchaba decir eso.

La gente camina como yo a diario donde radico actualmente y seguramente no se dan cuenta de lo que tienen, de lo mucho que hay aquí y de lo que seguramente se quejan, y me encantaría decirles, no se vayan, nunca, no dejen lo que es aquí, porque realmente se extraña.

Un par de veces utilicé mi cámara, y de nuevo el árbol, las calles, la gente…la ciudad entera me tiene enamorada y será difícil dejar lo que aquí tengo, pero me queda el hecho de saber que siempre puedo volver y vivir nuevamente lo que hoy les cuento.

Me siento extraña, hoy sentí miedo de no saber donde estaba, las calles cambiaron, dude, ¿estaré dirigiéndome en sentido contrario?...

En un semáforo en rojo mientras frente a mí cruzaban muchos autos a toda velocidad pensé: yo decidí, yo me fui… ¿Qué me detiene?

Cuándo vuelvo a mi habitación, la veo como antes, parece que nunca me fui de este lugar, lo que la hace un poco distinta es mi enorme maleta en un rincón, apenas hoy la vacié y acomode la ropa en mi closet, y mientras lo observo me doy cuenta de que la ropa ahora es distinta, de la talla ni hablar, pero soy otra mujer.

A un lado se mantiene intacta la repisa con libros y fotografías, he cambiado, mucho, poco, mejor, peor, hay de todo en cada imagen, pero aunque físicamente y en comparación me vea tan distinta, soy yo, reconozco esa mirada, en ella encuentro anhelos de cosas importantes, sueños, ideas y también melancolía…

Dicen que no se puede tener todo en la vida, quizás no al mismo tiempo, y esa melancolía podría reflejar algo que haya faltado en cada etapa.

Son muchas fotos, cada una tiene su historia, me tomaré el tiempo para mirar detenidamente y tratar de recordar que pasaba en ese tiempo, espero lograrlo, mi memoria se ha vuelto mala, y según el libro que leo actualmente eso se debe a los miedos guardados, así que ahora además de todo, hay más cosas que analizar.

Mi cama esta deliciosa, no es que sea cara ni mucho menos, es sólo que está rodeada de algo que es muy mío, logra atraparme y no sólo para dormir, si no para realmente poder descansar…extrañaba esto.

Algo que note de inmediato, es que antes de dormir pude apagar la luz y en casa no había ninguna otra encendida, siento calma, seguridad, siento que no soy yo como siempre cuidándome sola…

Apenas es el primer día…

jueves, 25 de marzo de 2010

Insomnio


Los minutos pasan y no logro desconectrme, pasan algunas cosas por mi mente, no sé si estoy temiendo o simplemente lo que pasa no me gusta para todos los días, su silencio me provoca confusión y me desmotiva, quiero creer que no pasa nada, pero es un hecho que las cosas tienen siempre una razón de ser y lo que podría ser una realidad es que llego a la relación algo llamado: desesperación.

No culpo a nadie, la situación de por sí es compleja, loca, diferente muy fuera de lo común, pero irónicamente es una increíble historia de amor y a la vez la más extraña o no creíble a primera vista.

Debería dormir, finalmente no pasaré del piso si caigo de la nube, y pero aún, para que desvelarse, para que caer en el circulo vicioso de amor-desamor-insomnio si finalmente como todo circulo cerrara en un punto y evetualmente llegaré de nuevo a amor y sólo pensaré: hubiera dormido más, todo está resuelto.

No he sentido mariposas en dos días, y si estuviera al otro lado del mundo ya estaría en el tercero un número fuerte si tomamos en cuenta que juntos tenemos 30 y unos cuantos más...no estamos tu y yo para jugar a ver que pasa si nos distanciamos cuando de por sí nos separan mucho miles de kilometros.

Definitivo, dormiré, tal vez con mi intento de carta de amor que más bien expreso bien lo que pasa por mi cabeza, corazón y vida logre algo positivo, y cuando suceda sólo agregaré algo que si ha sucedido en estas largas horas: te he extrañado.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Tiempo

No puedo creer cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que escribí, los meses vuelan, de pronto el trabajo nos absorbe y un día revisando en un cajón te das cuenta de cuantas muchas cosas has ido guardando y que tantas otras ya no utilizas.

Hoy abro mi cajón y reviso a fondo cada detalle ¡Estoy sorprendida!

He dejado pasar muchos días, muchas historias, o creo que pocas pero difereentes, complejas y sencillas, extrañas y casuales...estoy viviendo mi vida.

Hoy mi mejor amigo me dijo "estás un poco pasada de peso" y lejos de enojarme contesté que lo sé, que estpy consiente del hecho como tal, y aún así aunque lo intenté un par de veces he desistido y sigo comiendo mmm ¡¿qué pasa?! ¿debería estar motivada?

Alguien comentó que mi motivación se va rápido, y a veces siento que e sporque vivo así, con planes, metas, proyectos, ideas, no dejo descansar mi mente, no quiero permitir la monotonía y por eso exijo ese ritmo...y me llevo tras las patas mi cintura o lo poco voluptuoso que lucia mi abdomen hace un par de meses...nunca he sido abdomen plano, pero vaya, si de por sí para una mujer es complicado, yo tengo eso más toda la serie de complicaciones que implica ser yo, me refiero a alguien que actúa y vive como yo.

Creo que empiezo a planear algo, a ordenar pendientes, a reciclar, a pensar en que pasaría por ejemplo en el trabajo si mañana no viniera más, quizás lo que men os se me antoja es que mi jefe pudiera decir, está mujer tenía un desorden. Definitivamente no es eso lo que aprendí, y si me fuera quiero que las cosas queden en perfectas condiciones.

Cierto no voy por el momento a ninguna parte pero debo revisar bien cada cosas que hago, que tengo, analizar un poco y renovar, creo que eso es un buen motivante y lo necesito.

Escribiré más seguido, tengo un proyecto en mente, debo trabajar en el y hacer que suceda.

lunes, 25 de enero de 2010

Retomando Hábitos



De pronto perdemos el control, un día decimos: hay bueno ¿que tanto es tantito? y cuando nos damos cuenta todo es un DESASTRE.

Un día dejé mi departamento tan limpio que me sentía orgullosa de haberle dedicado tantas horas a lograr que finalmente se viera tan hermoso, tan de mujer, tan presentable para quien pudiera llegar. Con el paso de los días, la rutina de trabajo, las salidas con amigos, las horas durmiendo y más, pues fui dejando la ropa sobre la silla, los zapatos fuera de donde deben ir, el plato en la mesa del comedor, la ropa que traje de la lavandería en el sofá de la sala y así...

Y entonces hoy después de la siesta vespertina que pude tomarme al salir temprano de la oficina, reaccione.

Así como luce este lugar el día de hoy, ¿luce mi vida?, es decir, me pongo a dieta, adelgazo, logro cuerpazo para presumir y después...¿me como 10 tacos y no pasa nada?

¿Sucede que soy muy linda, me arreglo, me maquillo para verme mejor y un día simplemente olvido el maquillaje o cepillarme el cabello y salgo a la calle sin que me importe mostrar como soy realmente?

Como dirían nuestras maestras de primaria ¿así te educaron en tu casa? ¿así te bañas? ups! me sentí regañada y peor aún por mi misma.

Las cosas son simples, básicas y no hay que llegar al extremo.

Es decir, hay que saber arreglar el departamento, dejarlo bonito y a diario mantenerlo pasando la escoba (también debajo de los muebles), levantar los platos, lavarlos inmediatamente y no dejar que cobren vida en el fregadero, acomodar la ropa que traes de la lavanderia y ya viene doblada en donde debe ir, tender la cama al levantarte, y sobre todo comer bien, lo mejor posible, no es comercial, pero que real es "somos lo que comemos"

Lo anterior es un ejemplo, creo que el más real. Es cierto que en la actualidad la rutina es complicada, el tiempo no alcanza, el cansacio hace desistir de cualquier intento de orden, pero nadie lo hará por nosotros, nadie cuidara nuestra salud ni ordenará nuestro espacio.

Hoy me levanto, no niego que pude seguir acostada hasta mañana y decido que hoy mismo pongo orden en este lugar, acomodo la ropa en su sitio, lavo el tazón después de cenar el cereal, ya no son tacos, vuelvo al hábito saludable que si bien no es el más sabroso-delicioso (grasoso) es el que mejor hará a todo mi cuerpo.

Al hacer esto retomo también de manera automática la fuerza de voluntad para cerrar ciclos, para deja de pensar en lo que creía era conveniente para mí y que definitivamente ni cerca estaba. El corazón es como mi departamento, mientras más ordenado luzca, más posibilidades hay de recibir visitas gratas, quien dice que no podría llegar el esperado, así que hay que barrer bien.

Hoy me prometo a mi misma que intentaré con todas mis fuerzas lograr meterme al camino, no es sencillo pero cuando haces de las cosas un hábito todo es posible, así que empezando de cero y con la idea de que día a día ire agregando-eliminando algo más para llegar a mi bienestar total hoy hago mi mayor esfuerzo y con un plato de cereal como cena, inicio la semana y retomo los hábitos.

¿Lo intentarían?

miércoles, 20 de enero de 2010

Independencia para Soñar


* El año pasado

A veces pienso que me quejo demasiado, que no estoy conforme con cierta situación pero aquí sigo.

Hoy decidí que no volveré a quejarme más, que voy a vivir lo que me ha tocado y lo que he decidido.

Creo que es muy importante para que las cosas sucedan, que dejemos que así sea, que hagamos lo que nos toca, que soñemos, que luchemos, pero que no estemos aferrados a lo contrario, es decir, para que pensar en lo que podríamos estar haciendo, en lo que no tenemos, en lo que nos falta, si todo lo demás es increíble ¿no?

Todas las mañanas me levantó a las 05:00 AM creo que de el tiempo que llevo despertando a esa hora para ir a trabajar, sólo en 2 ocasiones he dicho ¡¡No quiero!! Y ha sido porque tenía un malestar en la garganta y una gripa insoportable, de ahí en fuera lo que hago me gusto, lo que hago lo disfruto, y tengo el trabajo que tanto soñé alguna vez…Es decir, Dios lo hizo posible, cuando tuvo que ser, y yo luche también para lograrlo, me preparé para cuando el dijera: vas.

Cuando me fui a vivir sola, pasaron por mi mente muchas cosas, pero lo que era un hecho y sin duda era que definitivamente no había marcha atrás, es decir no podría volver a mi casa con la familia porque algo no haya funcionado, entonces la presión era aún mayor.

La primera noche incluía una serie de emociones encontradas, recordé de pronto que alguna vez sentí miedo de dormir con luces apagadas, y ahora estaba ahí a punto de dormir, sola, tendría que apagar la luz, y si escuchaba algún ruido extraño, ya no sería mi mamá la que saliera a ver que era.

Era yo, la mujer independiente, la fuerte, la que dijo que podía hacerlo, tenía que resistir.

* Hoy Enero 20.2010 Retomando

Superé la primera noche, claro que antes de que el sueño y cansancio me vencieran pensé cosas como que al fin lo había hecho, que ya no había regreso y que tenía que irme bien o irme mejor que eso.

Unos pocos días antes de terminar el año anterior elegí no discutir conmigo misma ni quejarme de nada, opté por cerrar los 12 meses consiente de que estoy en el camino que yo quise, que cada sacrificio que haya que hacer es parte de todo el mundo mágico que quise crear para vivir y que cada noche es válido seguir sintiendo nervio al apagar las luces pero también cada noche cómo aquella primera es la oportunidad de empezar de nuevo, de cerrar los ojos y volver a soñar en todo lo que podré lograr un día.

Llevo 20 días del año sin quejarme respecto a nada, y de haber sabido antes, esta es la mejor forma de dar paso a que las cosas buenas lleguen y sucedan.

Pared en Blanco




2010. 20 de Enero

La primera vez que hice un blog pensé que no iba a tener mucho sentido, y de pronto al pasar de los días, las horas y todas las ocasiones que pude sentarme frente al monitor me di cuenta de que ya no podría parar.

De pronto me ví contando tantas cosas, recuerdos, anécdotas, y cada entrada era cómo estar describiendo lo que guardaba cada una de las fotografías que pensaba colgar en la pared cómo las que permanecían en archivo y el el albúm color verde que tanto me gusta.

Y un día sin saber bien la razón, quizás hasta sin ella, lo eliminé.

(Silencio Largo con cara de incredulidad)

Hasta Ayer, limpié bien la pared, pensé en pintarla de otro color y vestirla con recuerdos. Colgue el primer, segundo y tercer cuadro, en cada uno van incluídas fotografías de diferentes ocasiones, con diferentes personas importantes para mí, y cubriendo la parte del ego que siempre es reconfortante, algunas fotos propias dondé según yo y mi alta autoestima luzco linda.

Después de un par de ajustes y tratando de respetar la simetría de aquel rincón combinandola con el cómodo sofá, me decidí.

Hoy agregue algunas cosas más, creo que hasta soñe en lo que pondría y en cuánto tuve la oportunidad siendo aún muy temprano me senté frente al monitor y empecé a darle vida a esta pared de los recuerdos.

Es aquí donde podré tener cada una de las cosas que forman parte de mi vida, de lo que ha pasado, de lo que vivo ahora y quizás aunque aun no impreso también se agregue parte de lo que quiero vivir.

Inicia el nuevo proyecto. La Pared de Los Recuerdos